Ciudad Cenicero

Un tuerto entre los ciegos te sientes tú

El hormiguero aprieta, impone su cruz

Las calles solitarias sirven de consuelo

Te intentas evadir de Ciudad Cenicero

Aceras mojadas recuerdan tu anhelo

Llenan tus brazos heridas de hielo

Con el pecho casi vacío

Pero arde dentro un corazón

Sólo una razón: ¡Estar vivo!

Y serás mil trozos de un espejo roto

Y resbalan los sueños sin rozar el reflejo

Y el río (¡y el río!) te arrastra (¡te arrastrará!)

Directo a la cañada

Si vuelas (¡si viajas!) sin alas (¡sin nada!)

Con mechero y cuchara

Este avispero gris ya no se apiadará de ti

Te arrollará

Cuando el rebaño duerme se yerguen los lobos

Calcinando las almas de gente sin rumbo

Te tomarán el pelo, te darán el palo

Sufrirás la dicha del placer amargo

Písale la sien

A todo el que te exprima

Tírate a la yugular

¡Me cago en tu ruina!

Despegar, a volar

No volver a caer

Despegar, a volar

No volver de nuevo a tus pies

Despegar, a volar

No volver a caer

Despegar, a volar

No volver a tus pies